Bajo la lupa se encuentra la anterior administración de la coordinación regional de Protección Civil con base en Altamira, donde se reportó por parte de la ciudadanía la realización de otras actividades ajenas a la dependencia.
Rommel Martínez Flores, encargado de despacho, reveló que ya se realizó oportunamente la auditoría laboral y de equipamiento para el deslinde de responsabilidades.
Entre las irregularidades se encuentra el desvío de combustible que llegaba a la corporación, pues este no se aplicaba, debido a que dependían del municipio y señalaban que no había recurso, cuando el gobierno del estado les dotaba de alrededor 25 mil pesos mensuales.
Martínez Flores, añadió que hay un déficit de ambulancias, dado que al momento se tienen dos camiones contra incendios, dos unidades acuáticas, un camión para productos químicos, tres vehículos compactos que están descompuesto por fallas eléctricas y una camioneta RAM que se presume fue utilizada para uso personal, la cual tenia logotipos pero se les fue retirado.
Por último, dijo que no se va a despedir a ningún trabajador de la dependencia, brindándoles tres meses para que se activen, todo depende del desempeño en sus puestos de trabajo.
