Revelan macabro “safari humano” durante la guerra de Bosnia; millonarios pagaban por disparar a civiles

A casi tres décadas del fin de la guerra entre Serbia y Bosnia-Herzegovina (1992-1995), nuevos horrores cometidos durante el conflicto siguen saliendo a la luz. Esta vez, se trata de una denuncia sobre un “safari humano” en el que millonarios europeos, rusos y estadounidenses pagaban por disparar contra civiles, incluidas mujeres, adultos y niños.

La revelación fue realizada por el reportero italiano Ezio Gavezzani, quien cubrió el conflicto como corresponsal de guerra y, veinte años después, decidió hacer pública la existencia de esta práctica criminal que habría ocurrido en zonas boscosas a las afueras de Sarajevo.

Una cacería humana en plena guerra

De acuerdo con Gavezzani, grupos de adinerados —entre ellos abogados, empresarios y tiradores profesionales— viajaban hasta la región de los Balcanes para participar en una especie de macabra actividad recreativa: pagar por la oportunidad de disparar a personas indefensas, tratadas como presas de cacería.

Los hechos habrían ocurrido en zonas donde aún hoy existen vestigios del conflicto, y en momentos en que la población bosnia sufría el asedio de las fuerzas del general serbio Radovan Karadzic y el comandante Ratko Mladic, conocido como “El Carnicero de Bosnia”. Ambos fueron sentenciados por crímenes de guerra y genocidio ante la Corte Penal Internacional de La Haya por la masacre de Srebrenica, considerada la peor en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.

Identifican a tres italianos implicados

Autoridades europeas ya habrían identificado a tres ciudadanos italianos presuntamente involucrados en estas actividades de cacería humana. De confirmarse su participación, podrían ser juzgados por crímenes de guerra, un delito que no prescribe bajo el derecho internacional.

El horror documentado en Sarajevo

La ciudad de Sarajevo, una de las más golpeadas por el conflicto derivado de la desintegración de la antigua Yugoslavia, padeció:

  • Años de bombardeos constantes
  • Ataques contra población civil
  • Cortes prolongados de agua y electricidad
  • Un bloqueo militar que restringió alimentos y medicinas

Fue en las montañas y bosques que rodean la capital bosnia donde presuntamente operaba este “safari humano”, aprovechando el caos del conflicto y la vulnerabilidad de la población local.

Crímenes que no se olvidan

La denuncia abre la puerta a nuevas investigaciones que podrían involucrar a particulares extranjeros que aprovecharon la guerra para participar en atrocidades. Organismos internacionales han advertido que cualquier acto vinculado al genocidio o crímenes de lesa humanidad sigue siendo perseguible, sin importar el tiempo transcurrido.

A pesar de que la guerra terminó hace casi 30 años, su sombra sigue proyectándose en la memoria colectiva. Historias como esta demuestran que la verdad sobre los Balcanes aún no termina de contarse.