El regreso de los tres astronautas de la misión Shenzhou-20 tuvo que ser aplazado luego de que la cápsula con la que volverían a la Tierra resultara presuntamente dañada por el impacto de un fragmento de basura espacial, informaron agencias internacionales y la China Manned Space Agency (CMSA).
Los tripulantes —Chen Dong, Chen Zhongrui y Wang Jie— se encontraban listos para abandonar la estación espacial Tiangong este 5 de noviembre, tras casi seis meses en órbita, cuando el equipo de control detectó una anomalía en el casco de la cápsula. El análisis preliminar sugiere que un pequeño objeto, posiblemente un escombro espacial, golpeó la estructura del módulo de retorno.
Maniobras de emergencia y evaluación de daños
Ante la situación, la CMSA ordenó suspender inmediatamente las maniobras de reentrada y establecer protocolos de seguridad para la tripulación. Los astronautas regresaron a la estación Tiangong, donde permanecen mientras especialistas en tierra realizan una inspección detallada del daño.
De acuerdo con reportes de The Guardian, AP News y Reuters, la agencia espacial china indicó que la prioridad es “garantizar la salud y seguridad de los astronautas y el éxito de la misión”, por lo que el retorno permanecerá pospuesto hasta determinar si la cápsula Shenzhou-20 es segura para el descenso.
Una misión clave afectada por el riesgo creciente de basura espacial
La Shenzhou-20 despegó el 24 de abril de 2025 desde el Centro de Lanzamiento de Jiuquan. Su misión consistía en realizar experimentos y trabajos de mantenimiento en Tiangong durante un periodo aproximado de seis meses, como parte del programa de rotación continua de tripulaciones establecido por China para consolidar su presencia permanente en el espacio.
El incidente vuelve a poner en evidencia la amenaza que representa la basura espacial, la cual consiste en restos de satélites, cohetes y fragmentos metálicos que orbitan a gran velocidad y pueden impactar naves, estaciones u otros objetos en órbita.
Plan de contingencia en marcha
Mientras se evalúa la situación, los astronautas de relevo —que arribaron a la estación el 31 de octubre a bordo de la Shenzhou-21— colaboran en las revisiones y se mantienen disponibles para apoyar en caso de que la cápsula dañada sea descartada.
Entre los posibles escenarios, la CMSA analiza utilizar la nave Shenzhou-21 como vehículo de retorno alterno o, en última instancia, lanzar una nueva cápsula de rescate si se determina que el módulo afectado no puede ser reparado.
En espera de una decisión
La agencia espacial china no ha dado una fecha tentativa para un nuevo intento de regreso y continúa con estudios de impacto, pruebas de presurización y análisis estructurales del casco afectado.
Mientras tanto, los tres astronautas se encuentran seguros y en comunicación constante con los ingenieros en tierra, a la espera de instrucciones.