CIUDAD VICTORIA, TAM.– La jueza Roxanne Ibarra Canul, titular del Cuarto Juzgado de lo Familiar en Altamira, enfrenta una investigación del Consejo de la Judicatura del Estado que podría derivar en su destitución e incluso en un proceso penal que la lleve a prisión, tras detectarse fallos presuntamente parciales en casos de custodia.
El presidente del Consejo, Hernán de la Garza Tamez, explicó que el caso salió a la luz luego de la denuncia pública de Gabriela Salazar, a quien le fue retirada la custodia de su hija pese a existir denuncias de violencia contra el padre de la menor.
La madre expuso la situación durante la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a Ciudad Victoria, lo que obligó al Poder Judicial a intervenir de oficio.
Como parte de la indagatoria, se ordenó una visita especial al juzgado y se designó a tres visitadores judiciales para revisar expedientes y actuaciones.
“Personalmente he revisado el caso y ya se identificaron irregularidades que podrían derivar no solo en sanciones administrativas, sino también en hechos constitutivos de delito”, advirtió De la Garza Tamez.
El magistrado señaló que, de confirmarse la actuación parcial de la jueza, se integrará un expediente completo que será turnado al Ministerio Público, lo cual abriría la posibilidad de un proceso penal que podría enviarla a la cárcel.
La revisión también incluye resoluciones previas dictadas por el Juzgado Séptimo de lo Familiar, las cuales fortalecen la denuncia de la madre afectada.
De la Garza Tamez aclaró que no ha tenido contacto directo con la funcionaria, ya que son los visitadores quienes encabezan la investigación.
En cuanto a la posibilidad de frenar su llegada como magistrada —prevista para el próximo 30 de septiembre tras haber sido electa en junio pasado—, el presidente del Supremo Tribunal de Justicia indicó que será la investigación la que determine si procede su nombramiento o si, por el contrario, enfrenta consecuencias legales.