Tampico, Tam.- Lo que para la familia Jerez era una tranquila convivencia terminó en una madrugada de miedo y violencia. Vecinos de la colonia Pescadores denunciaron haber sido víctimas de abuso de autoridad y agresiones por parte de elementos de la Guardia Estatal, quienes incluso realizaron disparos en presencia de mujeres, menores de edad y miembros de la comunidad LGBT.
Los hechos ocurrieron el 31 de agosto, cuando la patrulla 2004 interceptó a los familiares que regresaban a casa. De acuerdo con el testimonio de Víctor Jerez, los oficiales llegaron con las luces apagadas y de manera agresiva intentaron someter a los ocupantes.
“No tenían motivos para detenerlos, querían esposarlos y golpearon a una señora. Cuando otros familiares salimos a ver qué pasaba, uno de los elementos comenzó a disparar… disparó varias veces mientras había mujeres y niños alrededor”, relató.
El denunciante asegura que, tras los hechos, fue trasladado a la Fiscalía General de Justicia, donde permaneció ocho horas detenido sin ser consignado y recibió golpes por parte de los oficiales. “El policía que disparó me amenazó. Dijo que yo iba a pagar por todos. Hoy lo digo públicamente: si algo me pasa, saben de dónde viene”, expresó con evidente temor.
Otros integrantes de la familia mostraron moretones y lesiones que, aseguran, fueron producto de la agresión. “Nos pasó a nosotros, pero le puede pasar a cualquier ciudadano. Se aprovecharon de la oscuridad en la colonia”, añadieron.
La familia reprochó que en ningún momento se presentaron mandos de la corporación para intervenir y subrayaron que no es la primera vez que vecinos de la zona denuncian abusos de la Guardia Estatal. Por ello, consideraron urgente que se realicen cambios internos en la corporación y no descartaron presentar una denuncia penal y ante Derechos Humanos.
Mientras tanto, el miedo permanece. Entre la indignación y la desconfianza, los afectados aseguran que decidieron hacer pública la denuncia para protegerse de posibles represalias.