Tampico, Tam.- Israel Vallarta hoy se dedica a recuperar su vida, luego de haber recobrado la libertad tras permanecer 19 años en prisión, acusado injustamente por la justicia mexicana. Como parte de este proceso de readaptación, decidió pasar unos días de descanso en Tampico, Tamaulipas, ciudad natal de su esposa, la activista Mary Sainz.
Entrevistado en la plaza de Armas, Vallarta mencionó que, desde que le fue concedida la libertad absolutoria, no ha recibido llamados judiciales ni ha tenido que presentarse en tribunales. Sin embargo, recalcó que tampoco ha habido disculpas públicas de las autoridades involucradas en su caso.
Recordó que desde 2006 existe una averiguación previa —hoy convertida en carpeta de investigación— contra quienes resulten responsables del montaje que lo mantuvo encarcelado, y en ella aparecen nombres de funcionarios que, por omisión o participación directa, tuvieron conocimiento de los hechos.
“Estamos de festejo, poco a poco voy adentrándome a la vida social. Estamos en reuniones familiares, conociendo a la familia nueva que creció en estos 19 años. Hoy disfrutamos el reencuentro. En este momento me estoy dedicando a recuperar mi salud y a convivir con mis seres queridos, de vacaciones en Tampico junto a mi esposa”, señaló.
A sus 55 años, Vallarta aseguró que también busca retomar su vida profesional, pues una universidad le ofreció una beca al 100% para estudiar la carrera de Derecho y especializarse como abogado. Paralelamente, atiende problemas de salud como fibrosis pulmonar derivada de neumonías por COVID, várices en la pierna izquierda y dolores lumbares provocados por las golpizas recibidas al momento de su detención.
“Tengo confianza en las autoridades y, si no, el pueblo mexicano pedirá cuentas. No he salido a exigir indemnizaciones ni compensaciones económicas. Sé que existe la recomendación de una reparación integral del daño; si llega, qué bien, y si no, no pasa nada. Hay otras formas de salir adelante”, expresó.
Respecto a Carlos Loret de Mola, quien transmitió el operativo como si fuera en vivo, Vallarta dijo que ya no es un asunto personal, sino una deuda con la sociedad:
“Ese tema queda en él: si da o no una explicación al pueblo mexicano. Yo no lo exijo, pero lo justo es que diga qué hizo, a qué intereses obedeció y si este fue su único montaje, lo cual dudo. Seguramente hay más en su haber”.
Añadió que su captura, ocurrida el 8 de diciembre de 2005 junto con la ciudadana francesa Florence Cassez, se dio en un momento de fuerte crisis de credibilidad de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI). Con el tiempo, se confirmó que esta institución, encabezada por Genaro García Luna, fue utilizada para fines políticos y de protección a grupos criminales.
“A Felipe Calderón no tengo nada que decirle, solo que Dios lo bendiga. Pero recordemos que esto empezó en el último año de Vicente Fox, y Calderón simplemente le dio continuidad”, finalizó.