En Buenavista, Tarandacuao (Guanajuato), un machete cortó la calma del hogar. Daniel ‘N.’, ebrio y descontrolado, atacó a su familia.
Santiago ‘N.’, apenas 9 años, se lanzó frente a su madre, Betzy Mariza ‘N.’, mientras el filo le alcanzaba el abdomen.
Horas después, su corazón dejó de latir. Su madre lucha por sobrevivir, con la cabeza marcada por el mismo machete que arrebató a su hijo.
Todo pasó en minutos. Los gritos, el caos, la sangre. Vecinos llamaron al 911; la policía llegó primero y trasladó a la familia. Santiago fue llevado al Servicio Médico Forense.
El agresor desapareció antes de que llegara la policía y la Guardia Nacional.
💔 Un niño que murió siendo héroe. Una madre atrapada entre vida y muerte.