En un dolor de cabeza se ha vuelto para el ayuntamiento de Ciudad Madero y la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios, dos comerciantes informales que se dedican a la venta de ostiones en las escolleras de playa Miramar.
Héctor Jesús Marín Rodríguez, Secretario del Gobierno Maderense , explicó que la semana pasada en un operativo conjunto entre 
los tres niveles de gobierno, se detectó a los vendedores comercializando los moluscos, sin la refrigeración adecuada, a la intemperie y sin los más mínimos cuidados para el manejo de alimentos.
Dichos aspectos ocasionan que el ostion se eche a perder de inmediato al estar expuesto a temperatura ambiente y puede provocar daños gastrointestinales graves como un cólera, por consumirse de manera antihigiénica ya que lo hacen en su concha la cual no está lavada completamente y aún trae consigo suciedad.
Mencionó que estos individuos son reincidentes ya que en varias ocasiones se les ha decomisado el producto y se les pide que se retiren, a lo largo de dos semanas se vuelven a instalar sobre la escollera y se les realiza la misma operación.
“Estamos previniendo enfermedades entre los ciudadanos, en el turista más que todo que acude a playa Miramar, la venta de ostión está prohibida en la vía pública y más cuando no cumplen con los estándares de refrigeración para la conservación del producto y eso es un inminente riesgo para la salud de quien los consume”, finalizó.