Potosí, Bolivia.– La desaparición de Fisher Rodrigo Gutiérrez, un adolescente de 14 años, culminó trágicamente tras confirmarse su fallecimiento en circunstancias que han estremecido a la población boliviana. Su cuerpo fue hallado sin vida 44 días después de haber sido visto por última vez, y su familia denuncia que el menor fue víctima de un ritual de santería.
Fisher desapareció el pasado 22 de marzo luego de salir de su domicilio ubicado en la calle Los Pinos, en la zona de Yacimientos. Según sus familiares, el joven se dirigía al Desfile de las Teas en la Plaza Avaroa alrededor de las 17:30 horas, pero nunca regresó. De inmediato, se activó una ficha de búsqueda ante la Dirección Departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y la comunidad se movilizó en protestas para exigir acciones efectivas por parte de las autoridades.
El 5 de mayo, su cadáver fue localizado en una quebrada de la zona de La Penitencia, cerca de un río. El hallazgo fue realizado por sus propios familiares, quienes aseguraron que el cuerpo presentaba signos que sugieren su uso en una ceremonia ritual.
“Tenía sullitos (amuletos andinos), dos q’oas (ofrendas rituales) preparadas, un ala de gallina, hilo blanco, cigarros fumados y un aguayo a su lado. Todo eso indica que lo usaron como ofrenda”, declaró el padre del menor, visiblemente afectado.
La familia denunció la escasa colaboración de las autoridades y afirmó que fueron ellos quienes realizaron las principales labores de rastreo. El caso ha generado gran indignación entre la población, que exige justicia y sanciones para los responsables.
De acuerdo con los primeros reportes, cinco adolescentes estarían siendo investigados como sospechosos por su presunta implicación en los hechos. La Fiscalía no ha emitido declaraciones oficiales al respecto.
El funeral de Fisher se llevó a cabo el mismo día del hallazgo, en un acto cargado de dolor y rabia por parte de familiares, amigos y vecinos, quienes acompañaron el sepelio exigiendo respuestas y justicia para el joven.
Las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer los hechos y determinar si efectivamente se trató de un crimen vinculado a prácticas esotéricas o si hay otras líneas de investigación abiertas.