La Federación Mexicana de Fútbol (FMF) ha suspendido a siete jugadores de los clubes Real Apodaca y Correcaminos, sumando un total de 57 años de inhabilitación por su participación en apuestas y manipulación de partidos. Entre los sancionados, destaca Francisco Tede Pérez, mediocampista de Correcaminos, quien recibió una suspensión de 16 años.
El caso salió a la luz cuando, horas antes de un partido contra Leones Negros, Francisco Tede Pérez fue retirado de la convocatoria bajo el pretexto de «asuntos familiares». Sin embargo, se confirmó que acudió a la FMF para rendir su declaración y posteriormente recibió la sanción mencionada.
Además de Tede Pérez, otros seis jugadores del Real Apodaca fueron suspendidos con penas que varían entre 2 y 7 años, dependiendo de su grado de implicación en las actividades ilícitas. La FMF ha decidido escalar el caso a la FIFA para que se tomen las medidas correspondientes a nivel internacional.
Hasta el momento, ni la Universidad Autónoma de Tamaulipas ni el Club Correcaminos han emitido un pronunciamiento oficial al respecto. Se espera que en los próximos días se realicen investigaciones internas para determinar si hay más involucrados dentro de la institución.
Este escándalo pone en entredicho la integridad del fútbol mexicano y subraya la necesidad de reforzar los mecanismos de control para prevenir futuros casos de amaño de partidos y apuestas ilegales.