El comerciante de pescados y mariscos en “La Puntilla” de Altamira, Gerzon Madrid, informó que entre 80 y 100 pescadores que realizan sus actividades en la laguna de Champayán siguen enfrentando dificultades debido a la escasez de especies, principalmente la tilapia.
Esta situación es consecuencia de la crisis hídrica que afectó al sistema lagunario, acabando con gran parte de la fauna.
En respuesta a esta problemática, los pescadores han buscado alternativas para generar ingresos, desempeñándose en trabajos semanales como la construcción, agricultura, plomería y carpintería, entre otros oficios.
Los propietarios de locales en el mercado de mariscos del centro de Altamira también enfrentan complicaciones derivadas de esta situación. Ante la falta de producto en la laguna, se ven obligados a adquirir mercancía en municipios cercanos, lo que representa un gasto adicional y un desafío para mantener sus negocios activos.