Cansados de tanto robo, padres de familia de la Escuela Primaria «Ford 187» en Matamoros, tomaron las instalaciones de éste plantel a manera de presionar a las autoridades educativas y policíacas a qué exista mayor vigilancia en el sector donde está enclavado este centro educativo y que la Fiscalía General de Justicia en Tamaulipas investigue al presunto ladrón porque a decir de la directora, maestra Adriana García Moctezuma, «hasta un video donde aparece el ladrón hemos entregado a la fiscalía con el fin de que sea detenido y nada, descaradamente se sigue metiendo a la escuela para cometer más robos».
A la primaria se presentaron elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas, elementos de la Guardía Estatal y autoridades educativas como la maestra Yolanda Chavira Estrada, titular de la Secude en Matamoros, donde la autoridad investigadora prometió poner más atención en la denuncia, los policíacos más rondines de vigilancia y el municipio con mejorar el servicio de alumbrado público en ese sector, pues a parte varias de las luminarias de esa área no funcionan.
Nos han robado hasta en veinte ocasiones: Directora.
En entrevista con la maestra Adriana García Moctezuma, dijo que de diciembre del 2023 a la fecha, «nos han robado hasta en 20 ocasiones y ésta última fue el pasado fin de semana. Hemos puesto las denuncias correspondientes y a la fecha no detienen a los ladrones y pues la verdad ya estamos cansandos de tanto robo», expresó.
Por su parte el supervisor de la Zona Escolar 204, maestro Francisco Santillan Flores, lamentó los múltiples robos que ha sufrido la escuela y confío en las autoridades en que ahora sí harán algo en este sector para detener la ola de robos que ha sufrido este plantel.
La maestra Yolanda Chavira Estrada, titular de la Secude Municipal, dijo que por lo pronto ya una cuadrilla de alumbrado público arreglará todas las lámparas que no funcionan en esta área y que parques y jardines desmontará un baldío que se encuentra enmontado y que está frente de esta institución.
Con estos acuerdos, los padres de familia desistieron de su postura y se abrieron los portones del plantel, reanudando sus labores los maestros con sus alumnos.