La temporada de jobito en la región sur de Tamaulipas, que tiene una duración de poco más de dos meses, está llegando a su fin. Esto se refleja en el muelle de pescados y mariscos de la zona centro de Altamira, donde la llegada de embarcaciones con cajas de jobito ha disminuido notablemente.
El agricultor Jacinto Zúñiga Rodríguez, dijo que la producción de esta fruta, que proviene de comunidades rurales como Cruz Grande, Mayorazgo y Cues de Palmas Altas, ubicadas en las inmediaciones del río Tamesí, fue posible a pesar de la sequía que afectó a la región. Los campesinos trabajaron arduamente durante dos meses, beneficiándose de la humedad residual en las tierras, lo que permitió la cosecha de la planta del jobito.
Al inicio de la temporada, los productores lograban vender la tara de jobito por hasta mil pesos; sin embargo, conforme avanzó la temporada, el precio ha caído a un rango de 250 a 400 pesos por caja.
Zúñiga Rodríguez, explicó que la falta de interés de los consumidores al finalizar la temporada ha influido en esta drástica disminución de precios.
A pesar de la popularidad del jobito para la elaboración de aguas frescas, nieves y otros productos durante los meses de calor, el desplome en los precios ha golpeado fuertemente a los productores, quienes ahora enfrentan pérdidas económicas considerables.