Nuevo Laredo, Tamaulipas, 24 de agosto de 2024 .— La calle Amado Nervo vuelve a presentar un hundimiento significativo, apenas un año después de haber sido rehabilitada. Este recurrente problema pone de manifiesto el uso de materiales de baja calidad y el deficiente trabajo realizado por el Gobierno Municipal que preside Carmen Lilia Canturosas.
El hundimiento, ubicado en la intersección de la calle Amado Nervo y la privada Washington, ha sido objeto de reparaciones en al menos dos ocasiones desde el 2021. Sin embargo, los vecinos reportan que, a pesar de las intervenciones, el problema persiste. Doña Mary, quien se dedica a la venta de comida en la zona, señaló: “Ya tiene más de un mes que vienen y la reparan, pero no dura mucho tiempo. El hundimiento vuelve a formarse, y yo me acuerdo que ya la habían arreglado antes. Mire, ahí está otra vez el pozo”.
El problema ha sido reportado tanto al Sistema Integral de Gestión del Agua (SIGA) como a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA), debido a que el hundimiento se encuentra a pocos metros de una alcantarilla. Sin embargo, las autoridades se desatienden, ya que no han tomado medidas adecuadas para acordonar el área o resolver la situación.
José López, un residente de la colonia, explicó que los vecinos han intentado mitigar el problema colocando ramas y tierra en el socavón. “Ya ni están las ramas que pusimos, hemos echado tierra para tratar de taparlo, pero el hueco sigue creciendo. Además, se está formando otro hundimiento más adelante. Lo peor es que los conductores no se percatan del socavón hasta que están muy cerca y no pueden evitarlo”, comentó.
Otro residente agregó que la calle Amado Nervo ha sido reparada en múltiples ocasiones, pero los trabajos siempre terminan siendo ineficaces. “Han cerrado toda la cuadra 19 y la privada Washington por los problemas que había, y aunque se han hecho reparaciones, el resultado siempre es el mismo. No hay cambios”, afirmó.
Según información de COMAPA, en 2021 se rehabilitó la cuadra 19 y parte de la 20, con la instalación de más de 25 metros de tubería de 8 pulgadas y tres descargas domiciliarias. Sin embargo, la mala calidad de los materiales y las deficientes obras realizadas continúan generando problemas. Los residentes temen que una desgracia ocurra para que finalmente se realicen las reparaciones de manera adecuada.
Este nuevo hundimiento refleja una vez más la necesidad urgente de que el Gobierno Municipal tome medidas efectivas para garantizar la calidad en las reparaciones y asegurar que las obras se realicen con los estándares necesarios para evitar futuras incidencias.