Karina Saldivar: privatizadora y metíche

La secretaria de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del gobierno de Tamaulipas, declara sobre la conveniencia de privatizar el servicio de recolección de basura en los municipios más poblados, dada la ineficiencia que han mostrado para cumplir esta obligación los ayuntamientos respectivos.

Las opiniones de la titular de SEDUMA, Karina Saldivar Lartigue, son la nota principal, la de ocho columnas, la de portada en el Diario de Ciudad Victoria del martes 20 de agosto del 2024.

La privatización de la recolección de desechos sólidos, el traslado y la disposición final, ya se experimentó en Reynosa, con malos resultados. La concesión amañada se dio a un supuesto inversionista extranjero, que en realidad era prestanombres de la familia del alcalde que otorgó la concesión, luego se traspasó dicha concesión hasta en dos ocasiones, se pagaron millones de pesos y se reconocieron adeudos multimillonarios por un servicio ineficiente.

Pasaron más de tres décadas para que el gobierno municipal cancelara esos compromisos. En la actualidad se trabaja con un particular en la disposición final de la basura. En resumen les digo que por la experiencia que hemos pasado, no es conveniente la privatización de ese servicio, y es falso de toda falsedad que los empresarios son mejores que los administradores públicos para hacerse cargo de las múltiples y variadas tareas que realizan los gobiernos.

Las desafortunadas declaraciones de la secretaria de chiripa Karina Saldivar, refuerzan la tendencia de varios funcionarios estatales, que se atreven a descalificar a los funcionarios municipales por ineficientes y corruptos, como si fueran superiores, como si las tareas a su cargo se atendieran con profesionalismo y esmero. Del caso concreto que les comento, de la SEDUMA, basta con darse una vuelta por el recinto en ruinas donde alguna vez funcionó la Casa de la Tierra, para comprobar que la señora no atiende sus responsabilidades, más allá de repetir el negocio de clausurar los bancos de materiales, con un modus operandi que perfeccionó Cabeza de Vaca y sus secuaces.

Es obvio que la señora Saldivar Lartigue no comparte, ni conoce ni entiende la filosofía de la 4T, de Morena, ni tampoco comparte el modelo de administración de los gobiernos de izquierda, que están a favor de la intervención estatal, que no satanizan a los servidores públicos, que están a favor del estado de bienestar y que no ven en el adelgazamiento del gobierno y en la privatización de los servicios, como meta y propósito del gobierno.

Con otros funcionarios, como el Acuaman Quiroga, la secretaria Karina Saldivar comparte también el complejo de superioridad respecto a los gobiernos locales, y por eso se atreve a dictar medidas sobre asuntos que no le competen, que no conoce, que no entiende y que no están acordes con el partido del gobierno en el que trabaja.