Nuevo Laredo, Tamaulipas, – La mañana de este viernes, la tragedia golpeó a una familia neolaredense cuando Raúl, un hombre de 82 años, perdió la vida al intentar cruzar la Calzada de los Héroes. Este fatídico accidente pone en evidencia la peligrosa realidad que enfrentan diariamente cientos de ciudadanos, quienes arriesgan sus vidas al cruzar esta vía sin la protección de puentes peatonales, cuya construcción ha sido olvidada durante casi tres años por la administración municipal encabezada por la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal.
Raúl, residente de la calle Doctor Mier, salió de su hogar con la intención de comprar chicharrones para el desayuno. Sin embargo, su camino fue interrumpido de manera trágica cuando fue atropellado por un vehículo Kia Optima modelo 2022, conducido por Juan Carlos, un joven de 21 años. El accidente ocurrió en la intersección de la Calzada de los Héroes y la calle Privada Río de Janeiro, a la altura de un puente vehicular, donde la falta de infraestructura peatonal y las decisiones recientes del gobierno municipal han exacerbado los riesgos para los transeúntes.
La Calzada de los Héroes, una de las arterias más transitadas de la ciudad, ha sido utilizada como vía rápida, lo que aumenta la peligrosidad para los peatones. A lo largo de esta calzada, desde Diagonal Lincoln hasta Carretera Aeropuerto, no existen puentes peatonales, obligando a los ciudadanos a cruzar por zonas no diseñadas para su seguridad.
Recientemente, el gobierno municipal construyó un puente vehicular en la intersección de Calzada de los Héroes y Eva Sámano, eliminando semáforos que proporcionaban un respiro para los peatones y aumentando los peligros para aquellos que necesitan acceder a edificios clave como el de Seguridad Pública, la Jurisdicción Sanitaria, la Clínica de Diálisis, el CRI Municipal y la colonia La Fe.
Este lamentable suceso reaviva las críticas hacia la gestión de Canturosas Villarreal, cuya administración ha sido señalada por no priorizar la seguridad peatonal en una de las vías más concurridas de Nuevo Laredo. La falta de acción en este tema ha resultado en una muerte evitable, dejando a la comunidad en duelo y exigiendo respuestas a las autoridades municipales.
La ineptitud y la indiferencia del gobierno municipal han quedado nuevamente expuestas, recordando a todos los neolaredenses que la falta de infraestructura adecuada no solo complica la vida diaria, sino que, en el peor de los casos, cobra vidas.