Tampico, Tam; 30 de mayo. “La estadística nos dice que junio es el segundo mes más llovedor del año después de septiembre, entonces, estamos esperanzados a que haya agua”, declaró en medio de la crisis hídrica más severa en los 200 años de la historia de Tampico Raúl Quiroga Álvarez, secretario de Recursos Hidráulicos del Gobierno de Tamaulipas.
La problemática puso en riesgo a por lo menos 300 mil empleos en Tamaulipas. Lo confirmó el funcionario estatal al confirmar que ya cerraron sus operaciones las primeras dos empresas de las más de 100 que están instaladas en el clúster petroquímico del sur de la entidad, “ya de manera oficial la Comisión Nacional del Agua les ordenó cerrar sus extracciones desde hace ya varios días, algunos están cerrando sus procesos de producción,-los industriales- nos informaron que ya hay dos empresas que ya se fueron de la zona”, evidenció Raúl Quiroga Álvarez.
En la actualidad están sin agua más de 800 mil personas del sur del estado y norte de Veracruz, sin embargo, las autoridades tamaulipecas se esfuerzan por abastecer del líquido a sus pobladores, por eso pactaron con sus homólogos en San Luis Potosí, el trasiego de agua del río Tampaón, en Ébano al Sistema Lagunario del Río Tamesí que abastece del vital recurso a los ciudadanos de Tamaulipas y nortveracruzanos de Pánuco, Tampico Alto y Pueblo Viejo.
La sequía consecutiva de los últimos nueve años, aunado a la poca inversión en infraestructura hidráulica y el huachicoleo del agua que se de en el centro del estado de Tamaulipas, provocó que lagunas enteras estén secas, los ríos perdieron su cauce y se generó un impacto severo.
“La laguna de Champayán se va a rescatar cuando se presenten las lluvias, sin duda alguna, en este momento pensar que una actividad humana podamos rescatar la laguna es imposible; se van a volver a llenar las lagunas no me cabe duda habían estado llenas cientos de año seguramente. Es primera ocasión que están secas al 100 por ciento”, dijo Quiroga Álvarez, al finalizar una reunión privada con empresarios e industriales de la zona costa de Tamaulipas.
Una de las estrategias para no dejar sin agua en su totalidad a la población de Altamira, Madero y Tampico fue el bombeo del recurso hídrico desde la zona de riesgo de El Mante, en la región cañera centro sur del estado como un acuerdo entre la Secretaría a cargo de Quiroga y la Conagua, sin embargo, el funcionario estatal sentenció que el impacto al sector primario podría ser mortífero por eso la urgencia de que llueva.
“Si nosotros dejamos permanente el escurrimiento, nos va a durar para todo el año, pero, no lo podemos dejar permanentemente porque hay daños allí arriba que ahorita son menores, pero si los dejamos en el tiempo sin agua, pues van a tener pérdidas totales de sus cultivos y es gente humilde sobre todo ejidatarios que de buena fe están compartiendo con nosotros o los que viven en Tampico, Madero y Altamira su escaso volumen de agua”, declaró.
La zona sur no se quedará sin agua: autoridades
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