Tantoyuca, Ver.- De sobra es conocido, el deplorable estado en que se encuentran, la mayoría de las carreteras del norte de Veracruz.
El tema de las rúas abandonadas es el tema toral de aquellos que aspiran a obtener un cargo de elección popular, y una vez que ocupan sus puestos la mente extrañamente se les nubla, y se olvidan de la reparación de las carreteras.
Ante ello los voluntarios de Sinarem de manera por demás estoica, se están dando a la tarea de «tapar», los enormes hoyancos que se ubican a lo largo y ancho de las carpetas de rodamiento del norte de Veracruz.
Ahora estos brigadistas en atención prehospitalaria, se convierten en «reparadores de carreteras», ante la nulidad de los gobiernos estatales y federales por rehabilitarlas.
Sus ambulancias o vehículos utilitarios de estos valerosos brigadistas, sirven para transportar enormes piedras para taponear los también enormes » cráteres», que asemejan escenarios lunares dignos de películas de ciencia ficción.
De esta manera contribuyen un poco, en prevenir accidentes que pueden resultar en volcaduras de grandes consecuencias.
Actualmente en el tramo correspondiente de la carretera que conduce a Tantoyuca a la altura del punto conocido como El Palmito, los brigadistas se han encargado de reparar tan deteriorada rúa.
Y es que es de sobra conocida que el tramo que va de Tempoal a Tantoyuca, se encuentra en deplorables condiciones; siendo escenario recurrente de accidentes automovilísticos, que incluso han costado la vida a más de un tripulante o chofer.
Con sus vehículos particulares los voluntarios de Sinarem, apoyan de manera desinteresada al bienestar de su comunidad.
Esperemos que esta loable acción de voluntarios de Sinarem, tenga repercusión y despierte un poco la vergüenza de las autoridades estatales y federales, para que de forma seria de nueva cuenta y en su agenda tengan proyectado la reparación de la siempre olvidadas carreteras del norte de Veracruz.
Por L.C.C. Francisco Javier Díaz