Pueblo Viejo, Ver.- En Pueblo Viejo prevalece una costumbre que afecta la producción del ostión, tanto en la laguna como en el río Pánuco.
Lo anterior porque prevalece el relleno de calles con la concha de este producto, lo cual incide que en diversos sectores se aprecie varias arterias rellenas de la concha del molusco.
Esto en muchos casos es generado por la cultura que tienen los pescadores libres, que realizan el desconche del ostión, en sus domicilios y prácticamente en sus propios terrenos arrojan la concha, lo que convierte prácticamente en botaderos de las áreas de sus domicilios.
Asimismo la disciplina juega un factor determinante sobre todo en las cooperativas, que hace algunas décadas era muy formal y obligada en el sentido de que se arrojaba prácticamente el 100% de la concha al río, y a la laguna; lo cual permitía la recuperación del molusco ya que había todas las condiciones ideales para su hábitat.
Tristemente por desconocimiento o simplemente por la cultura que se tiene, mucha de la concha termina tapando charcas o botada en las calles, como si se tratara de cualquier desecho.
El pescador José Luis identificado con el alias del «El Negro» señaló que mucha concha de molusco se desperdicia, y son los pescadores los que están implicados directamente en esta situación, admitiendo que las mismas cooperativas ya no repoblan los bancos de ostión cómo le hacían anteriormente.
Recordó que entre más inmediato se devuelva la concha a la laguna, es mejor la condición de esta, para que la larva se adhiera y pueda desarrollarse en condiciones más favorables, porque si la concha se mantiene mucho tiempo expuesta al sol de alguna forma pierde sus características y se alisa lo que complica la adhesión de la larva, por lo cual hay aspectos importantes que se tienen que tomar en cuenta para favorecer a este molusco vivaldo.
Por Francisco Javier Díaz