El caso de los migrantes venezolanos raptados y posteriormente resguardados por autoridades mexicanas es el claro ejemplo de un gobierno endeble e inservible. Son máximo unos 3 mil kilómetros entre la frontera de Reynosa, Tamaulipas, en México, con la línea limítrofe de la República de Guatemala, y en este viaje cientos de miles de humanos pierden la vida, unos quedan mutilados y algunos con más suerte llegan al sueño americano.
Para los obradoristas no es fácil admitir que no pudieron con el monstruo de la migración, claro, no es sencillo controlar el tránsito ilegal de personas y mucho menos cuando existen policías coludidos con los traficantes o las líneas de autobuses prometen destinos incumplidos que se cortan cuando filtran la información de los pasajeros y su nacionalidad de origen. Gobernar no es lo mismo que instalar Casa de Campaña en el Zócalo capitalino, ser gobernante es dar resultados o asumir el compromiso.
Y “háiga sido como háiga sido”, en Tamaulipas se dio un resultado favorable. Fueron encontrados con vida los venezolanos en mención, pero ahora resulta que los detractores del gobierno local, encabezado por Américo Villarreal Anaya, critican la versión “encontrada” entre que si fueron rescatados o negociada la liberación de los migrantes, como sea, por fortuna están vivos y muy probablemente regresarán a su país de origen para agarrar fuerza y volver a intentar llegar al otro lado.
Sin embargo, para los políticos es muy fácil escupir al aire, se les olvida que la gravedad no descansa, y ahora reclaman lo acontecido en territorio tamaulipeco, cuando lo que deberían exigir en bloque los oriundos de Tamaulipas es la incapacidad de los primeros mandatarios y jefes de Estado de Centro y Sudamérica, pues si fueran más eficientes en su política pública y migratoria, México no fuera el tercer país seguro de los migrantes.
Ahora bien, en Tamaulipas no se tendría la necesidad de desplegar equipos de “inteligencia” y comandos militares para buscar gente que salió corriendo de su país de origen, porque votó por gobernantes inservibles e incapaces. No, las Fuerzas Federales deberían enfocarse en labores más específicas, completamente contrarias a estas.
Los que hoy alzan el reclamo o pretenden juzgar el “esclarecimiento” del hecho que involucra a los venezolanos, por qué no reclaman a Carlos Manuel Merino Campos, gobernador de Tabasco; a Rutilio Escandón Cadenas, de Chiapas; ya sé, les falta valor para meterse con la “dueña del jaguar” Layda Sansores San Román, en Campeche, porque les sacará sus trapitos al sol, y bueno, seguramente no se refieren a la ingobernabilidad de Cuitláhuac García Jiménez, profesor con suerte que le quedó grande el cargo de gobernador en Veracruz, porque es perder el tiempo, ya lo sé.
Los enemigos del presente régimen tamaulipeco no deberían sentirse tan salerosos e irse a la fácil, porque si estos mandatarios mexicanos cumplieran con su misión de gobernar y el Instituto Nacional de Migración (INM), bajo la administración de Francisco Garduño Yáñez, se comprometiera, en Tamaulipas no habría la necesidad de buscar humanos. No es justificación para nada, pero si ya se resolvió, no juzguen, mejor propongan y afronten el origen. Tamaulipas es el “último” escalón antes de alcanzar el sueño americano, y si los del sur y centro trabajaran, acá, otra historia se contaría.
En la intimidad… A unos se les acaba el negocio migrante, y a otros las vacaciones. Bajo la conducción del rector Dámaso Anaya Alvarado, la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), reanudó este viernes 5 de enero sus actividades administrativas que corresponden al ciclo de primavera 2024. Siguiendo el calendario académico/administrativo establecido para el año 2024 por la UAT, el personal de la institución retomará sus labores en todas las sedes ubicadas en las regiones centro, sur y norte del estado. Tras finalizar el periodo de descanso correspondiente a las festividades de diciembre, el personal de la Universidad reanudará sus actividades administrativas, las cuales serán fundamentales para preparar el inicio del ciclo escolar enero-mayo de 2024.
Por cierto, parece que el alcalde de Tampico no quiere tomar vacaciones, no descansó ni en las fiestas decembrinas, por supuesto que no es reclamo, pero es importante subrayar que se le observa, por eso mismo reiteró su compromiso de que durante el presente año se fortalecerán las acciones de limpieza, alumbrado público y mejoramiento del entorno, para seguir consolidando a Tampico como una de la ciudades más limpias y ordenadas de todo el país.
Todo el Cabildo, hasta los regidores de Morena, destacan la transformación de la ciudad, resultado de la suma de esfuerzos entre gobierno y sociedad, además de la participación activa de los diferentes sectores productivos y sociales de la ciudad. En Tampico huele a continuidad y limpieza.
@dect1608
