¿Que pasa en la UAT?

La semana pasada anunciaron que el presupuesto de la Universidad Autónoma de Tamaulipas tendría un recorte de 620 millones de pesos. La secretaria de Finanzas del gobierno del Estado, Adriana Lozano, fue la encargada de divulgar esta información, que representa un gran perjuicio para la máxima casa de estudios de Tamaulipas.

Esta semana, y sin contar aún con información oficial, se ha difundido la versión de que están preparando la salida del rector Guillermo Mendoza, para abrirle paso al ex secretario de Desarrollo Rural del gobierno del Estado, – y primo hermano del gobernador-, MVZ Damaso Anaya, quien ya presentó su renuncia al cargo, para cumplir con el requisito que en ese sentido estipulan los estatutos universitarios, para los aspirantes a dirigir la universidad.

Desde luego que las acciones que reseñé en los dos párrafos iniciales, son prueba del poco aprecio que le tienen, en palacio de gobierno, a la educación superior pública y en particular a la Autónoma de Tamaulipas.

La versión que ha difundido la prensa aliada al gobierno, es que la UAT estaba plagada de agentes afines al ex gobernador Cabeza de Vaca y con eso justifican y aplauden la medida, que repite la misma circunstancias que provocaron las condiciones que hoy presenta la casa de estudios, y me refiero a la intromisión del gobierno en el manejo de una institución que en teoría debería ser autónoma.

Si el mal que pretenden combatir es la presencia de agentes ajenos a la universidad, o que siendo parte de la comunidad universitaria deciden ponerse al servicio del gobierno en turno, por supuesto que el remedio no es replicar esa misma práctica de violentar la universidad al imponer desde afuera a los rectores, o los jefes de prensa y secretarios de administración, como recientemente ocurrió con el señor Marco Batarse.

En cuanto al «primo de oro» que dejó de ser «el orgullo de mi nepotismo» en el gabinete, para aspirar a ser «el orgullo de mi nepotismo» en la Universidad, les comparto que en mi primer búsqueda en los archivos del Google, solo encontré el episodio de los delitos electorales en la elección de gobernador y su paso por la dirigencia del PRI, que en algún tiempo fue mal visto por los militantes y simpatizantes de la izquierda, eso en el renglón de los negativos.

En cuanto a los positivos de Damaso Anaya, me dicen que es un tipo muy chambeador, que es catedrático desde hace más de veinte años, y que siempre ha cumplido con el trabajo, que es muy tesonero, que ha sido protagonista, más no protagónico, que se maneja con discreción, con perfil bajo, que en su juventud fue mata perros (encargado de los antirrabicos) y que es el primo consentido de ya saben quién.