No hay maroma que los salve

Parece broma pero es verdad. Las instalaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), y su servicio a la derechohabiencia no habían estado tan mal como ahora, bueno, ni en los tiempos del neoliberalismo estuvo peor como con la Cuarta Transformación.
No hay maroma que pueda contradecir que al IMSS lo mató el gobierno actual, que Zoé Robledo aspirante a gobernador en Chiapas debería ser investigado por convertir al Instituto Mexicano del Seguro Social en una sucursal del infierno.
En el Hospital General número 6 del IMSS en Ciudad Madero, el elevador no sirve desde hace meses, bueno “ya está arreglado”, pero a veces falla, un día sí y otro también; pero eso no le importa al sistema, lo que ellos prefieren es darle dádivas y despensas a los ciudadanos que aplauden desesperados un apoyito de ese tipo aunque ir a la consulta en el IMSS sea poner un paso en el ataúd.
La más reciente desgracia del Seguro Social se escribió en el sureste mexicano, en Quintana Roo, donde una niña de 6 años murió a consecuencia de una falla en el elevador del nosocomio en Playa del Carmen, según presentó un desperfecto y terminó prensando a Betzabé, el tal Zoé Robledo se desentendió y sus estrategas justificaron diciendo que el servicio de elevadores está subrogado a la empresa Soluciones Integrales de Transportación Vertical en México, la cual contrató en febrero de 2023 para dar mantenimiento a los elevadores del Hospital General de Zona 18.
Síganle como van, al fin Playa del Carmen queda lejos.
En la intimidad… Mensaje especial a los rodanteros de los 43 municipios tamaulipecos, a todas las personas que compran pacas de ropa.
Les aviso que el dirigente del PRI Tamaulipas, Carlos Ernesto Solís Gómez, anda buscando pantalones, unos así como los Topeka o los Wrangler, unos que lo hagan parecer hombre, los Levi’s, no, esos no, porque lo van a confundir con Alito.
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