El deporte tiene una hermosa cara a la que sólo puedes acceder con el paso de las siguientes competiciones y se llama “revancha”. Nadie como los atletas conocen esa faceta de la vida; en que a decir verdad, únicamente los tercos, diciplinados y apasionados logran convertir ese amargo sabor de la derrota en el rico y suculento dulzor de la victoria.
Todo comenzó en Tlaxcala, cuando los tamaulipecos Valentina García Gómez y Gerardo Olegario Rodríguez Banda, ganaron su pasa al mundial de Tiro con Arco en sus respectivas categorías, y aunque la historia de los deportistas casi siempre se vive alejada del apoyo gubernamental, en esta ocasión no fue así.
La CONADE, como el INDE Tamaulipas con el profe Raga capitaneando al equipo local y la ex esgrimista olímpica Úrsula González, con quien los deportistas tamaulipecos se han sentido muy arropados y la consideran una pieza clave en el Instituto del Deporte, pues cumple a la perfección con el mensaje humanista que pregona el gobernador Américo Villarreal Anaya, ellos, ahora sí, apoyaron a estos atletas de la academia de tiro con arco ARCUM que entrena en Tampico.
La historia hacia la medalla en el Mundial de Tiro con Arco, celebrado en Limerick, Irlanda, se comenzó a trazar inmediatamente después de dominar las finales Nacionales CONADE 2023, debido a que el coach tampiqueño Jorge Payan, gestionó ante Úrsula González los recursos necesarios para que el equipo pudiera concentrarse en la Ciudad de México (CDMX), Payan y su compañero Ernesto Lugo, oriundo de Yucatán supieron sacar provecho del apoyo que les brindó el Instituto del Deporte de Tamaulipas, al grado que entre estos dos y sus pupilos consiguieron dos de las tres medallas de la delegación mexicana en Irlanda.
Pero antes de llegar a la gloria, la flecha mexicana de carbono, surcó un primer obstáculo cunando por asuntos de logística los arqueros quedaron atrapados en New York, Estados Unidos; el destino comenzaba a medir la concentración del equipo mexicano pues pasaron más de 50 horas sin poder salir del país de las barras y las estrellas, por fortuna, llegaron a la sede mundialista el mero día de practica, coloquialmente diríamos: “muy ahuevo” llegaron.
Para variar, después de la entumida por el largo viaje y el estrés generado por el miedo de no llegar a la justa deportiva para la que se prepararon sin descanso; bajaron del avión y el clima estaba a 10 grados, soplaba el viento como en el mejor día del otoño, y de repente, salía el sol como en la primavera más luminosa, pero eso no era todo, de repente el clima jugaba con los nervios de las arqueras y arqueros, se nublaba el cielo como queriéndolos espantar y se repetían esas extrañas condiciones climáticas, a tal grado que la campeona del mundo batalló.
Pero para espantar y poner de rodillas a un deportista mexicano se necesita más que eso, los dioses irlandeses no pudieron con las niñas mexicanas que en el clasificatorio: Regina Bernal (Jalisco), quedó como número 1 del mundo; la tampiqueña Valentina García (Tam), se posicionó en el decimo tercer puesto, y Lia Lugo (Yucatán), en 18.
Sus flechas listas para volar y sus arcos ajustados, solo era cuestión de que transcurrieran los días, el equipo se había clasificado en el tercer lugar mundial, apenas unos cuantos puntillos los separaba de Estados Unidos, que ya había hecho lo suyo con esas 50 horas de “juego”
La delegación mexicana de tiro llegaba a su cuarto día de competencia; antes se les había escapado una presea, no importa, la sangre azteca estaba lista para ir por más y así fue. En la categoría de equipo, que es donde participan las tres niñas (Valentina, Lia y Regina), ya con el ranqueo que habían manejado, les tocó medirse en 4tos de final vs Canadá, fue de agua, algo así como lanzarle una flecha a una sandia y ganaron 218-198; en semifinal otra vez vs EUA, eso si se puso feo, nos convirtieron en sus “hijos” en varias categorías, y en esta el equipo mexicano perdió 224-211.
Pero llegó el momento de lanzar por el bronce, no iba a ser fácil, era el turno de enfrentar a España… Un escenario final que no iba a regalarles una nueva oportunidad, no en este mundial, así que debían tomar decisiones frías y duras; era el momento de los diálogos imperdonables y rígidos como la flecha partiendo el aire. La ansiedad había entrado al grupo mexicano, y es que en el partido pasado vs Estados Unidos, las cosas no salieron como se esperaba, el nerviosismo andaba jugando a favor de las españolas, pero entonces los coaches decidieron como equipo cambiar el orden de las niñas para arroparlas y comenzó la tampiqueña Valentina García.
No se rajó, sintió el arropo de todos, y abrió la partida sin piedad, se convirtió en la punta de la flecha, pero en esta ocasión era ella la filosa y aguda punta del equipo mexicano en busca del bronce, lo consiguió, fue decidida y determinante, pero Lia Lugo, la cual fue la más certera en el 10, se encargó de cerrar muy bien el set.
Para la ultima partida en el desafiante set final, antes de que cerrara España sus últimas 3 flechas, el equipo de México estaba abajo 3 puntos y las españolas no soportaron la presión de tener el ardor de la sangre azteca vibrando y compitiendo por ser parte del podio ganador, y así fue, México 209 a 208
Es una sensación indescriptible que nos transmiten con su entrega, su trabajo sin descanso; valió la pena cada segundo de entrenamiento, cada flecha lanzada, cada regaño, cada error, cada acierto, cada motivación finalmente se convirtió en un bronce mundial.
En la intimidad… De Jorge Payan, coach de la seleccionadas, entrenador en la UAT de la Academia ARCUM, qué les puedo decir, lo que les diga se quedará corto.
A ese tipo lo define el trabajo, no se cansa de picar piedra, por muchos años ha dejado muy claro que el tiro con arco es su pasión, y al paso que va, un día, otro año el deporte le va a dar la revancha y subirá a lo más alto del podio, pero también a la vuelta de las competiciones, un día estará en la Villa Olímpica.
Créamelo, es perro como una flecha ya desprendida del arco.
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