¿A quién se le ocurrió amagar a la autoridad mexicana con la quema de colchonetas? ¿Quién les dijo que mancillar la ley de mi país iba a ser un acto sin consecuencias?
Ya lo habían hecho al cruzar la frontera sin autorización pero quisieron pasarse de la raya, claro, hoy más que nuca somos el tercer país seguro sin etiqueta; tenemos al gobierno bailando al son que tocan los Estados Unidos, creyeron que iba a ser fácil.
La muerte por incineración de casi medio centenar de ilegales en el Centro de Retención administrado por el Instituto Nacional de Migración (INM), en Ciudad Juárez, Chihuahua; frontera con Texas, Estados Unidos, evidenció las blandas y burladas leyes migratorias de México, sí, desgraciadamente una tragedia más en el gobierno de la esperanza transformadora.
Pero qué esperar del Gobierno Federal, si los que deberían ser su contrapeso están igual o peor. En la Cámara de Diputados la creencia de los integrantes de la Comisión Migratoria es transitar de una visión de control, a una donde se garanticen los derechos de las personas y fomentar una cultura de apertura e integración, para quien quiera permanecer en nuestros país.
Lo malo es que nadie habla de leyes, del orden, las consecuencias, del cuándo sí y cuando no a la migración controlada, nadie, ni siquiera la oposición, porque también está en pañales.
Al que les permitió tener un encendedor en el centro migratorio, al director o titular de esa oficina; el mismo comisionado Francisco Garduño Yáñez y hasta Antonio López Díaz, Director General de Control y Verificación, deberían ir a prisión directa sin barandillas, pero también que a nadie más se le ocurra volver a desairar a la autoridad migratoria y mucho menos desafiarla con la quema de colchonetas.
A México se le respeta, y esto, no debe ser una premisa opcional, ni sujeta a colores o preferencias partidistas.
En la intimidad… Ya falta menos para el gran día, la gran fiesta de Tampico que se celebra este próximo 12 de abril, con su tradicional encuentro con los altamirenses, la caminata y caravana junto a nuestros hermanos de Altamira; así como la sesión conjunta de Cabildo y la entrega del máximo galardón que otorga el municipio al mérito ciudadano, la medalla Fray Andrés de Olmos, que en este año se otorgará al empresario Carlos Dorantes del Rosal; así como el extraordinario recital que ofrecerá Fernando de la Mora en uno de los escenarios más hermosos de nuestra ciudad, como lo es, la plaza Hijas de Tampico, la cual está rodeada del monumental Mercado Municipal, el antiguo edificio de la Aduana Marítima y la estación del Ferrocarril.
Le tocó a Chucho Nader organizar la súper fiesta por los 200 años de Tampico ¡que alegría!
@dect1608
