El estado de Kerala, en el sur de la India, se encuentra en alerta tras la muerte de un niño de 12 años por el letal virus Nipah, lo que obligó a las autoridades sanitarias a realizar un rastreo de contactos y aislar a cientos de personas.
Nipah, relacionado con el virus Hendra, se detectó por primera vez en Malasia, en 1998. Los primeros síntomas incluyen fiebre alta, dolor de cabeza y cambios de comportamiento. En una etapa avanzada, puede provocar encefalitis.
Hasta ahora, las autoridades de Kerala han identificado y aislado a unas 251 personas, incluyendo 30 familiares cercanos del menor fallecido. Once muestras dieron negativo el 8 de agosto.
Se cree que los cerdos y los murciélagos de la fruta son los huéspedes intermediarios del virus. También se transmite a través de los fluidos como la saliva y la sangre y no hay una vacuna preventiva.
Otro problema con el virus Nipah es su alta tasa de mortalidad (se calcula en 70%). Cuando apareció por primera vez en Kerala, en 2018, sólo dos de 19 infectados sobrevivieron. En 2019, cuando se volvió a detectar en un hombre de 23 años, el rápido aislamiento evitó más contagios y el paciente sobrevivió.