El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, dijo que el huracán Ida dejó tras de sí daños «catastróficos» y que las autoridades estatales se centran en las labores de búsqueda y rescate en las zonas afectadas del estado.
«Todavía estamos en modo de salvar vidas aquí, haciendo búsqueda y rescate. Las carreteras, las autopistas hacia la zona más afectada estaban completamente obstruidas con escombros, líneas eléctricas caídas, árboles», dijo Edwards.
El gobernador aseguró que las autoridades están «haciendo un progreso realmente bueno» desde que comenzaron las operaciones de búsqueda y rescate por tierra esta mañana al amanecer.
«Enviamos esas fuerzas y, por cierto, ayer ya teníamos equipos de búsqueda y rescate de 16 estados en Luisiana», dijo.
Ante este panorama, los gobernadores de Luisiana y Misisipi pidieron la declaración de emergencia al Gobierno federal, y el presidente, Joe Biden, se la concedió para poder así agilizar la entrega de material, personal y fondos para enfrentar las posibles consecuencias de Ida.
Más de 2,400 efectivos de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, en inglés) ya han sido desplegados en la región, además de 12 equipos de búsqueda y rescate y un centenar de ambulancias.