Las autoridades de Tokio han notificado 4.392 nuevos casos de coronavirus, la cifra más alta registrada un domingo desde el comienzo de la pandemia, según la agencia oficial de noticias japonesa Kyodo.
El número supone un incremento en relación con los 4.295 contagios del domingo anterior, si bien es inferior a los 5.074 reportados el sábado, cuarto día consecutivo con más de 5.000 nuevos casos de infección en la capital japonesa.
A pesar de las estrictas medidas sanitarias, Japón está lidiando con la mayor ola de infecciones desde el comienzo de la crisis, por amplia diferencia con respecto a otras pasadas, sin que de momento haya empezado a disminuir la presión sobre el sistema de salud.
La gobernadora de la prefectura, Yuriko Koike, no se ha andado con rodeos. “No es exagerado decir que Tokio se enfrenta a su mayor crisis. La situación actual es como un desastre natural. No hay momento más importante que ahora”, ha indicado.
La situación de los hospitales de las grandes ciudades está al límite. En Okinawa, por ejemplo, esta semana se han agotado las camas destinadas para los pacientes graves.