Ha pasado un año desde que la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 se convirtió en el principal tema de preocupación y conversación para la población española. Cuando la posibilidad de que se produzca una cuarta ola de contagios ya está en boca de todos y España se encuentra de nuevo en riesgo alto de contagio, las autoridades sanitarias andan con pies de plomo en esta época en la que, de no haber emergencia sanitaria, deberían desarrollarse fiestas populares como las Fallas en la Comunidad Valenciana y un puente que, en otra ocasión, sería el caldo de cultivo de viajes masivos, tanto dentro de la geografía española como fuera de las fronteras del país. Para evitar un posible ambiente festivo en días tan señalados en el calendario laboral, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas concretaron un acuerdo mínimo de restricciones que marcarán la Semana Santa 2021, un periodo vacacional por el que todas las regiones patrias, a excepción de las islas Canarias y las Baleares, ya se encuentran confinadas perimetralmente tras entrar en vigor el pasado 26 de marzo las limitaciones con las que se controlará la movilidad en este puente.
En esta coyuntura, a pesar de que este año no se podrá viajar como en otras ocasiones, la duda recurrente de cómo cae la Semana Santa en 2021 no decae para tener en cuenta qué días son los festivos. En este sentido, cabe tener en cuenta que la lógica que se sigue para celebrar la Semana Santa viene determinada por la cuaresma, un periodo de 46 días que se inicia con el miércoles de ceniza, que se celebró el pasado 17 de febrero, y culmina con el Domingo de Resurreción, es decir, con la fiesta central de la Semana Santa, que en su concepción litúrgica busca conmemorar anualmente el viacrucis, la muerte y la resurreción de Jesucristo. Los días claves de esta semana de festividades se determinan en función del calendario lunar, de acuerdo con lo que explica Europa Press, por lo que el domingo posterior a la primera luna llena que tiene lugar tras el equinoccio de primavera se fija el Domingo de Pascua (o de Resurreción), que en esta ocasión coincide con el 4 de abril al haber plenilunio el 28 de marzo.