Beto Santos, uno de los hombres señalado en 2020 como uno de los creadores de un chat de WhatsApp en el que se compartían fotografías íntimas de mujeres indígenas, ahora es precandidato de Morena para una diputación local en Oaxaca.
La activista Yasnaya Elena denunció este jueves que Santos era uno de los integrantes y creador del grupo.
En marzo de 2020 se reveló que funcionarios del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) acusados de estar dentro del grupo de WhatsApp “Sierra XXX” en donde se compartían imágenes de mujeres ayuujk (mixes).
Ahora Santos busca la diputación por el distrito 10 Mixe-Choápan.
Entre ellos estaba Rolando Vásquez Pérez, quien fue despedido. Según el INPI, “se formuló la denuncia respectiva ante la Fiscalía Especial para Delitos de Violencia contra la Mujer y la Trata de Personas de la Fiscalía General de la República (FGR), para que proceda de conformidad.
En un video en sus redes sociales, Santos pide a los simpatizantes de Morena que lo apoyen para ganar la encuesta. “Yo les pido nuevamente me apoyen para que si a su casa llega la encuesta, Beto Santos sea la respuesta”.
Asegura que con su llegada se reivindicará la izquierda en la región.
En marzo de 2020, 214 organizaciones de mujeres indígenas y afrodescendientes, así como 344 defensoras de derechos humanos condenaron la creación de ese chat.
“Manifestamos nuestra preocupación por la violencia ejercida por personal del INPI, mediante la difusión de fotografías íntimas de mujeres indígenas de la nación ayuuk, en el grupo de WhatsApp “Sierra XXX””, señalaron.
Además exigieron una disculpa al INPI por minimizar la denuncia pública del chat.
Al momento en que se dio a conocer la existencia del chat, Adelfo Regino, titular del INPI, dijo que Rolando Vásquez se comunicaba a través de aplicaciones como cualquier otra persona y que la foto que había compartido no era pornográfica porque la mujer tenía ropa.
“Entiendo que son gente de Oaxaca, son ciudadanos y como cualquier ciudadano tienen sus grupos de Whatsapp”, dijo Refino a medios en 2020.
Tras sus declaraciones, en un comunicado el Instituto aseguró que no minimiza la denuncia pública “y es falso que normalice la violencia contra las mujeres, por el contrario, conscientes que las mujeres, en especial las mujeres indígenas, han vivido un lamentable contexto de violencia, discriminación y exclusión en todos los ámbitos de la vida cotidiana, el INPI expresa una disculpa por cualquier acción u omisión en su relación con este importante sector de nuestras sociedades”.