CARACAS, 28 oct (Reuters) – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que la refinería Amuay fue atacada el martes con una poderosa arma que todavía no ha sido identificada, y sostuvo que la nación sudamericana tiene reservas de gasolina para 20 días.
Una explosión afectó el martes una unidad de destilación de Amuay, la más grande de la nación OPEP con capacidad de 645.000 barriles por día (bpd) y ubicada al oeste del país, sin reportes de heridos.
«Derribaron una torre con un nivel de espesor en sus aceros superior a un tanque», dijo Maduro el miércoles en una conferencia de prensa online desde la casa de gobierno. «Quisieron provocar una explosión».
Maduro, quien no dio detalles sobre el incidente en la instalación petrolera, agregó que las autoridades capturaron «a dos extranjeros en el estado Zulia (en el noroeste del país) con planes de asesinar» a dirigentes del gobierno.
El incidente en Amuay se produjo cuando los trabajadores intentaban reiniciar una de las unidades de destilación que había sido detenida recientemente, dijeron sindicalistas. Las plantas proporcionan nafta que sirve como materia prima para la producción de gasolina en la vecina refinería Cardón.
La alguna vez vasta red de refinación de 1,3 millones de bpd de la nación de la OPEP enfrenta limitaciones por los años de desinversión y mala gestión, lo que ha causado una aguda escasez de combustible en Venezuela.
El gobierno ha culpado con frecuencia a la oposición y a Estados Unidos por presuntos ataques a la infraestructura crítica del país, incluso después de apagones eléctricos generalizados el año pasado. La oposición rechaza esas acusaciones y asegura que son excusas por el colapso que registran los servicios públicos.
La unidad reformadora de la refinería Cardón de 310.000 bpd está produciendo gasolina actualmente, según dos personas familiarizadas con el tema, pero la mayoría de las otras plantas productoras de gasolina en Venezuela no funcionan. Esta semana se detuvo la unidad de craqueo catalítico fluido de Cardón.
Maduro señaló que las refinerías del país están produciendo alrededor de un 30% más de combustible que los niveles de demanda interna, sin detallar las plantas operativas. Agregó que Venezuela había importado combustible de Irán y de otros países, aunque sin especificar cuáles.
El mandatario confirmó el arribo al país el martes de un avión iraní, pero no dijo qué trajo la aeronave. Sí agregó que en anteriores vuelos iraníes llegaron medicinas y repuestos para refinerías.
Maduro declinó responder si era cierto, como dijo un alto funcionario en Teherán semanas atrás, que parte de la gasolina importada desde la nación persa fue pagada en oro.