El cantante Juanes ha echado mano de su cuenta de Instagram para narrar la alocada situación que vivió recientemente después de que su esposa y él cometieran un delito sin darse cuenta.
Tras prometerles que su vehículo de la marca Tesla estaba aparcado en el garaje como de costumbre, Juanes les dio las buenas noches y regresó al interior de la vivienda, pero algo le hacía sentirse intranquilo y le impedía concentrarse en la canción que se traía entre manos. Justo en ese momento se le ocurrió que podía haber usado la aplicación móvil de la compañía de Elon Musk para demostrar que era realmente el propietario de su coche, así que se apresuró a volver a la calle, donde todavía estaban esperando los policías sin saber aparentemente qué hacer.
“Yo no paraba de mirar a los lados para ver si algún vecino nos estaba observando y pensando: ‘¿Pero este qué ha hecho?’”, ha bromeado. “Me acerqué a un policía, le mostré la app del carro y le dije: ‘Esta en mi aplicación del carro y ese es mi carro, porque además lo he usado para regresar con mi esposa a casa’».
Sin embargo, Juanes accedió a abrir el automóvil para comprobar que todo estaba en orden y en cuanto echó un vistazo al interior del habitáculo se dio cuenta de que algo no iba bien. “Cuando miré dentro, vi una servilleta y otras cosas y me dije: ‘No es el mío'», ha desvelado. “Literalmente, Karen y yo nos robamos un carro sin darnos cuenta”.
Lo que el músico no comprendía era cómo podía haber abierto la puerta y haber puesto en marcha el motor, aunque afortunadamente los agentes se tomaron la situación con humor y le ayudaron a contactar con el dueño original del Tesla, que era idéntico al suyo. Finalmente el propietario se presentó en su casa y le confesó que se había dejado las llaves dentro del coche cuando aparcó en el mismo restaurante en que habían cenado Juanes y su esposa, de ahí que ellos pudieran arrancarlo y marcharse sin ningún problema cuando lo confundieron con el suyo.
«Nos abrazamos y nos reímos porque esto es muy loco», ha afirmado para aclarar que no hubo que lamentar daños, ya que su propio Tesla seguía aparcado justo donde lo había dejado.