El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que respetarán el amparo para suspender los trabajos en un tramo del Tren Maya, pero que las obras no se detendrán.
En su conferencia de prensa matutina afirmó que el amparo, conseguido por organizaciones de diversas comunidades, tiene tintes políticos.
El mandatario acusó que detrás de dichas organizaciones hay personas que quieren afectar a su gobierno y “que no quieren que hagamos nada”.
Sin embargo, añadió, “vamos a cumplir con los ordenamientos legales, vamos a respetar la autoridad”.
El presidente refirió que aún no conocen todos los efectos que tiene el amparo y negó que la obra vaya a ocasionar daños ambientales.
Aseguró que los trabajos que actualmente se hacen no afectan a ninguna zona pues solo se centran en las vías ya existentes.
“No se detiene la obra porque no hay razón, cómo procede un amparo para una obra que se está haciendo done hay una vía de tren desde hace 80 años”, cuestionó.
López Obrador señaló que su gobierno siempre ha priorizado el medio ambiente e incluso recordó alguna de sus acciones como la reforestación de un millón de hectáreas.
Sin embargo, el amparo de suspensión definitiva para las obras del Tren Maya en uno de sus tramos no fue concedido por algún tema ambiental.
Se trata de un recurso solicitado por parte de algunas organizaciones ante el riesgo que implicaban los trabajos pese a la pandemia por COVID-19.
Este martes, una juez federal falló a favor de las organizaciones al considerar que en estos momentos de emergencia se debe dar un “valor preponderante al derecho a la salud”.
La juez determinó que los trabajos que conlleva el Tren Maya “requieren despliegue de diversas actividades que debe realizar un grupo numeroso de personas y en consecuencia se requerirá de diversos servicios esenciales y no esenciales en la comunidad, lo cual conllevará a un aumento de actividades en sus zonas públicas”.