Un conductor embistió con su camión cisterna contra las personas que participaban este 31 de mayo en una multitudinaria manifestación de Minneapolis (Estados Unidos) que exigía justicia por la muerte de George Floyd y clamaba contra el racismo y la brutalidad policial.
Los manifestantes se encontraban en la autopista I-35W, que había sido cortada al tráfico, cuando el camión se giró hacia ellos a gran velocidad. Se vivieron momentos de tensión con miles de personas en estado de pánico echándose a uno y otro lado de la calzada para evitar ser atropellados, aunque aparentemente nadie resultó herido.
Cuando el vehículo se detuvo, la multitud se dirigió a la cabina y sacó de ella al conductor. Los manifestantes comenzaron a golpearlo y rompieron también el parabrisas del camión.
Poco después llegó la Policía, que se llevó detenido al conductor y lo trasladó con lesiones leves a un hospital local. El gobernador de Minnesota, Tim Walz, declaró más tarde que el hombre había sido dado de alta y puesto bajo custodia policial. Los motivos del ataque se desconocen, aunque un testigo explicó a la NBC que el individuo dijo que solo quería “intimidar” a los manifestantes y detener la protesta, que fue calificada por las autoridades de “pacífica”.
