Llama iglesia católica a no criticar al prójimo, no caer en corrupción, ni violentar a mujeres

Durante miércoles de ceniza

Por María de Jesús Cortez
Tampico.- Al oficiar la misa con motivo del miércoles de ceniza, que marca el inicio del tiempo de Cuaresma, el Obispo de la Diócesis de Tampico, José Armando Álvarez Cano llamó a los católicos a ayunar pero de la corrupción, de criticar al prójimo y, sobre todo ayunar de la violencia, principalmente contra las mujeres.
En la iglesia Catedral a las 07:00 horas dio inicio a la misa misma que pese a las inclemencias del tiempo se vio muy concurrida.
«La penitencia de Cuaresma es una: la invitación de hacer ayuno, que es lo más significativo, pero el ayuno no sólo es de alimentos, sino de ayunar de violencia, ayunar de ofensas de unos con otros, ayunar inclusive en el hogar respetando a las personas y sobre todo como sociedad ayunar de la corrupción, de la ingobernabilidad», dijo el Obispo.
Añadió que no sólo es un llamado personal a cada cristiano, sino un llamado a la conversión de parte de la sociedad de todos esos vicios que tenemos.
Por ello, José Armando Álvarez Cano expresó que la iglesia invita a todos a volverse a Dios, a cambiar las actitudes, desde la fe que tienen los católicos.
Dijo que cuando uno se abstiene de criticar a los demás, cuando se abstiene de estar molestando a las personas en nuestra casa, ese es el verdadero ayuno.
«No más violencia contra las mujeres, nosotros hemos vivido con tristeza toda esta violencia que se ha venido realizando contra las mujeres de manera especial y no quisiéramos nosotros centranos como en una moda, sino reconocer con responsabilidad el problema que existe, una violencia que inicia desde la familia con el poco respeto hacia las mujeres, con la manera en cómo se trata a ellas, la abstinencia también nace de decir abstente de la violencia, de criticar, porque la violencia no solo es física sino de humillación, a veces ignorar», recalcó la máxima autoridad de la Diócesis de Tampico.
Manifestó que no sólo es decir «voy a dejar de tomar coca cola», sino de abstenerse de todo aquello que esta reñido con la falta de valores.
Tras la misa, el Obispo procedió a hacer la imposición de ceniza a los feligreses que acudieron a escuchar la palabra de Dios.