La narco bancada

472
David Ed Castellanos Terán
@dect1608
Cansados de un sistema político plagado de gobernantes incapaces de brindar seguridad, mantener y recuperar la paz, han surgido en México, grupos de civiles armados que buscan ofrecer estabilidad a sus familiares y vecinos, los denominados policías comunitarios, y autodefensas; que por cierto no son lo mismo.
En el estado norteño de Tamaulipas, se vivió el primer enfrentamiento entre un cártel de la droga contra un ciudadano, se trata de don Alejo Garza Tamez, quien defendió su rancho a balazos, pues los delincuentes pretendían arrebatárselo, finalmente luego de varias horas lidiándose a tiros, murió el ranchero oriundo de Nuevo León, convirtiéndose en el primer hecho de autodefensa en México. Actualmente existen al menos 50 grupos de ciudadanos armados en por lo menos seis entidades del país.
Aunque al heroico acto de don Alejo, no se le reconoce como la primer autodefensa en la historia moderna, algunos músicos le han hecho su corrido, y el movimiento armado encabezado por Hipólito Mora, se considera como la primera guardia comunitaria surgida allá por febrero de 2013, en La Ruana, Michoacán; ese ganadero y agricultor se organizó con los pobladores para defender la familia, tierra y riquezas, del cártel de Los Caballeros Templarios. Aunque insisto, la batalla entre don Alejo, y una fracción de los Zetas, fue la primera gran defensa ciudadana vivida en México, específicamente en el municipio de Padilla, en Tamaulipas, tan solo tres años antes del surgimiento de Hipólito Mora.
Entonces, tomando en cuenta que Tamaulipas, fue la cuna de las autodefensas y luego Michoacán; en otras entidades como Guerrero, Veracruz, Morelos y Tabasco, los comunitarios han decidido tomar las armas para hacer lo que el Gobierno no puede, no quiere, o sabrá Dios qué pretende. El asunto es que del 2010 que don Alejo, hizo frente al cártel que más se expandió en el sexenio de Felipe Calderón, a la fecha, han seguido unos 50 grupos de pobladores denominados autodefensas y otros identificados como policías comunitarios.
En Tamaulipas, existe la columna armada “Pedro José Méndez ”, y tiene una integrante activa en el Congreso local, sí, una representación legislativa que incluso obtuvo la reelección en el pasado proceso electoral celebrado en junio de este año, la diputada panista Nohemí Estrella, ganó en las urnas y se volvió a quedar con el escaño, pero no solo eso, defiende el movimiento aseverando que no son delincuentes, que son gente bien nacida en la entidad, defensora de sus familiares, seres queridos, y sus tierras; de esos tantos ciudadanos cansados de la incapacidad de los gobernantes federales que en campaña prometen mucho y en el ejercicio justifican todo culpando al pasado.
La diputada Nohemí, dice confiar en el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, en el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, pero obviamente ambos están mucho muy lejos del nivel de confianza que le tiene a sus compañeros de la columna armada “Pedro J. Méndez”, como a los mismos ciudadanos tamaulipecos por quienes redactará una iniciativa en cuanto inicie el nuevo periodo legislativo para promover que todo habitante de Tamaulipas, tenga la oportunidad y prioridad legal de portar un arma para defenderse de la invencible criminalidad.
Que violen a tu hija, tú tienes un arma, ¿qué vas hacer? Es la escalofriante y temible interrogante que lanza la diputada tamaulipeca Nohemí Estrella, representante de la columna armada “Pedro José Méndez”, y autodenominada defensora de las víctimas de la violencia… la panista que niega ser una narcodiputada.