Los perros ‘bonitos’ siempre enternecen a las personas, pero ¿qué sucede con aquellos que no son tan agraciados? Al menos en Estados Unidos los reconocen, pues dentro de su considerada fealdad abren una nueva forma de belleza. Es decir, no hay perrito feo.
Scamp, mejor conocido como el Vagabundo, ganó el premio al perrito más feo de este año en el recinto ferial Sonoma-Marin Fairgrounds & Event Center de California, EU.
Sin embrago, la victoria no la obtuvo fácilmente, pues compitió contra otras 19 mascotas. Además de que en su andar canino pasó por la tortuosa experiencia de vivir en la calle por bastante tiempo.
Scamp o como lo presentaron en la página del concurso el ‘perro rastafari’, fue rescatado de las calles de Los Ángeles.
“Tenía marcas de tortura, no podía respirar bien, pero con amor y cuidados sanó y ahora estoy muy orgullosa de tener un hermoso perro campeón”, señaló para el medio UnoTV la mujer que rescató a Scamp.
El perrito con belleza poco convencional se caracteriza por su pelo revuelto y las trenzas que, por más que se le dé una bañada extrema de acondicionador, son difíciles de deshacer.
Con este primer lugar de fealdad perruna, la dueña de Scamp obtuvo como premio mil 500 dólares en efectivo.