La muerte de un hombre de 38 años y su mujer de 37 han puesto en alerta a las autoridades de Mongolia, que, según The Siberian Times, han puesto bajo vigilancia médica al pasaje de un avión con turistas internacionales. Estos han sido confinados en un pueblo hasta que se levante la cuarentena establecida que, como mínimo, será de 21 días.
Aunque las informaciones son algo confusas, como señalan en Forbes, lo que se sabe a ciencia cierta es la muerte confirmada de un matrimonio por peste bubónica. La principal hipótesis que se baraja es que la contrajeron después de cazar y comer una marmota. Al parecer, existe una tradición local según la cual si se come carne cruda y los órganos de este animal se fortalece la salud.
La información que recogen diversos medios internacionales es que el hombre cazó la marmota, que estaría infectada, y compartió la carne con su mujer. Primero falleció él y tres días más tarde, ella. La peste bubónica, que está causada por una bacteria, es capaz de matar a un ser humano en cuestión de 24 horas sin tratamiento.
El brote ha hecho temer a la autoridades locales que este se pueda extender y de ahí que hayan optado por poner en cuarentena a todo aquel que haya podido tener contacto con el matrimonio, que deja cuatro hijos de entre dos y 13 años de edad. Así, según publica Forbes, los pasajeros de un vuelo se habrían visto afectados y su avión permanecería en cuarentena en el aeropuerto Internacional Gengis Kan de Ulán Bator.
Estas 158 personas, en su mayoría turistas de nacionalidad rusa, estadounidense, sueca, suiza, alemana, surcoreana y holandesa, habrían sido examinadas por los médicos y se encontrarían en Ulgii, en la frontera con Rusia. Algunas fuentes señalan también el cierre de fronteras para evitar cualquier tipo de propagación.
El doctor N. Tsogbadrakh, director del Centro Nacional de Medicina, ha sido quien ha dado los pocos detalles que circulan de cómo creen que se produjo en contagio e insistido que es está prohibido comer marmota precisamente para evitar situaciones como esta.
Según la Organización Mundial de la Salud, entre 2010 y 2015 se registraron 3.248 casos de peste y 584 de ellos acabaron con la muerte de la persona infectada. La peste bubónica, también conocida como peste negra y muerte negra, provocó en el siglo XIV una epidemia que acabó con un tercio de la población europea.
Esta enfermedad está provocada por una bacteria que suele transmitirse por la picadura de pulgas o por el contacto con animales infectados, habitualmente roedores.
En cuanto a los síntomas, al principio puede confundirse con una gripe (fiebre, dolor de cabeza, malestar general…) y va evolucionando (vómitos, naúseas…).