Núñez García indicó que tratan de disminuir al máximo ese ilícito y también están al pendiente cuando suceda algo en el interior de ese hospital como robo de menores o algún otro ilícito y actuar con rapidez.
“Antes teníamos 48 cámaras pero ahora todo está cubierto, hay un cuarto de control que ve todas las cámaras, tratamos de disminuir al máximo el robo hormiga, pero también tratamos nosotros de estar al pendiente si sucede algo al interior del hospital, ahora sí que estar en tiempo real”, indicó.
Las áreas vulnerables que cubren con las cámaras son neonatos, tococirugía y terapia intensiva.
Entre lo que más se roban están las jeringas, ampolletas y medicamentos.
Cuando han detectado a algún trabajador incurriendo en irregularidades, señaló que se levantan las actas administrativas y que de hecho hay algunas vigentes pero también pueden llegar a un proceso penal que implica la separación del cargo.