¡Como decía mi abuelita!
Por Víctor Torres
Han pasado los primeros 100 días del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, para algunos políticos antagónicos ha existido aciertos y desaciertos, aunque la última palabra la tiene el pueblo, quien lo mantiene en las preferencias, según las encuestadoras del 86 por ciento.
Y es que mientras las calificadoras y partidos como Acción Nacional y el Revolucionario Institucional han dado puntuaciones no muy halagadoras en los primeros días, lo cierto es que ya transcurrió el tiempo y con ello, la posibilidad de que termine los seis años, sin mayor problema.
Pero, no son 100 días, sino casi 300 días de trabajo y hacer política, ya que desde que ganó la elección AMLO, los comentarios en torno al desarrollo del país han provocado variaciones en la moneda internacional, además en la bolsa de valores y por supuesto inversiones nacionales y extranjeras.
Para muchos analistas, concluir con la obra del nuevo aeropuerto es un desacierto, como también la reducción de salarios de altos funcionarios, la escasez de gasolina, el aumento al combustible, las becas a los «nini», regalar dinero a todos, el cierre de las guarderías, la postura asumida con Venezuela, el cierre del penal, conocido como las «Islas Marías», entre otras.
Pero, también han sido aplaudidas, quitar las pensiones a los expresidentes, acabar con la corrupción, aumentar el salario mínimo – aunque no se refleja en los bolsillos de los ciudadanos – destinar millones a la recuperación de las refinerías, apoyos a los adultos mayores, becas a estudiantes, y más que ha ido aplicando.
AMLO sale a flote en los primeros días de Gobierno, pues la ciudadanía considera que el tiempo es muy poco para bridar una calificación, al encontrar un país sumido en la banca rota o bien vendido a los extranjeros, y se requiere de más lapso para lograr resultados.
Tal es así que los resultados de las investigaciones, la aprobación del Presidente de la República está entre el 67.1%, de Consulta Mitfosky y el 86% que alcanza en la encuesta de Parametría. Cifras que comparadas con los expresidentes, se los lleva de calle.
Pero, quien no anda muy bien, es el partido que fundó y lo llevó al poder, el Movimiento de Regeneración Nacional, y su líder Yeidckol Polevnsky Gurwitz, quien es acusada de tratar de vender la elección en Tamaulipas, aconsejada por los Senadores Guadalupe Covarrubias y Américo Villarreal, lo que podría generar una inestabilidad política en los próximos meses.
Y es que dicho instituto lejos de consolidarse en los próximos procesos, mantiene una política interna de golpeteo entre las “tribus”, que no es bien visto por los propios militantes… Y ¡Como decía mi abuelita! “El me canso… ganso…”
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