Por Juan Carlos Velarde
Pánuco, Ver.- Tristes cabizbajos y enfrentados a un panorama desolador e incierto, se encuentran los pescadores afiliados a diversas cooperativas en la zona norte de Veracruz.
Ante el drama que viven derivado de los altos índices de contaminación en ríos y lagunas, causados aparentemente por algunas empresas, señalan que su fuente de trabajo prácticamente destruida.
Indicaron que desde hace varios días han observado cambios drásticos en la coloración del agua del vaso lacustre.
Cuando cientos de peces aparecieron flotando muertos, comprendieron la magnitud de la tragedia ambiental que les tocó vivir.
Erasmo Domínguez Izaguirre, socio de la cooperativa Alto del Jobo, dijo que para ellos “ se acabó todo, el agua está oscura, negra y contaminada, ya no tenemos futuro”
Por su parte, el señor Juan de Dios Pérez, miembro de la cooperativa de Palma Reales, dijo que las familias que dependen de esa actividad perdieron su único ingreso.
Fernando Montes de Oca, de la cooperativa Vega Cercada, dijo que la devastación es total. Se acabaron las crías y las especies grandes, señaló.
Dijo que desde el fin de semana comenzaron a sentirse los efectos de la crisis ecológica.
Indicó que el agua no sirve ni para utilizarla en los baños, por lo que exhortó a que se realice una investigación a fondo para determinar responsabilidades.
Cabe destacar que los pescadores dieron a conocer que personal de la Comisión Nacional del Agua, tomó muestras en partes en donde la afectación era menor, por lo que deben realizarse evaluaciones más exhaustivas.