“Tenemos contratados laboratorios de calidad que nos dan muestras de que las compactaciones de las terracerías estén a su nivel, que los concretos vengan con la resistencia de proyecto y bueno, supervisores de parte de nosotros que estén verificando los espesores, la granulometría y los puntos de especificaciones cubiertos en el proyecto”, precisó el entrevistado.
Pedro Pablo Rangel precisó que están fiscalizando de manera permanente la obra pública.
Para ello, dijo que tienen unos contratos de igualas con laboratorios de la localidad y a ellos les piden las pruebas de capacidad de carga, de permeabilidad y de compactación.
“No, lo que no pasa se rebota, hemos encontrado que los suelos que habíamos especificado resultaron con menor resistencia, entonces vemos la especificación y damos un refuerzo adicional”, resaltó el funcionario.
Explicó que la resistencia es por kilómetros cuadrado y por centímetro cuadrado.
El entrevistado recalcó que si bien quieren hacer más obra pública, como pavimentación de calles, superar en un 50 % la meta del año pasado, no depende de ellos. “Esperamos hacer más de 200 calles”.
Cabe destacar que ya fueron licitados 10 con recursos del año anterior y les quedó poco presupuesto.