En el marco de la disputa por la reducción de sueldos en el Poder Judicial de la Federación, Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, indicó que la reducción no es una negociación, sino un asunto de principios.
Durante su conferencia matutina, opinó sobre el posicionamiento que jueces y magistrados realizaron desde las escalinatas del edificio de la institución de San Lázaro.
“Es estado de Derecho no estado de chueco. Y se tiene que respetar la Constitución. Se molestan, pero, la verdad, es que, como se dice coloquialmente, se rayaban, sueldos elevadísimos”, dijo.
“Dicen que no es cierto que ganen 600 mil pesos mensuales los ministros. Tengo la información, es cosa de verla en el presupuesto, son siete millones al año en sueldo bruto, más otras prestaciones que no están ahí indicadas. Pero si no son 600 mil, son 500 mil. Y no tengo la menor duda de que son los servidores públicos mejor pagados del mundo, solamente Donald Trump gana más que el presidente, con todo respeto, de la Suprema Corte. Y hay datos sobre esto”.
El mandatario aseguró que desde antes de asumir el poder se sabía que bajaría los sueldos de los altos funcionarios, que eliminaría la pensión de los expresidentes, que vendería el avión presidencial, entre otras promesas que poco a poco han ido sucediendo.
“No es de negociación. Esto es un asunto de principios, si por eso hubo un cambio”, indicó.
“Esto no es nuevo, no es que llegué y se me ocurrió que iban a bajar los sueldos de los altos funcionarios públicos, para aumentar los sueldos de los de abajo. Lo vengo diciendo desde hace años, fue un compromiso de campaña”.
“Si lo analizamos, de los cinco billones, 500 mil millones (del presupuesto), lo que le llega a la gente es muy poco. Todo es para el mismo gobierno, ya sean sueldos, pensiones y jubilaciones para los que trabajan en el gobierno, los gastos operativos del gobierno, el pago de deuda del gobierno”, indicó.
“Entonces, tenemos que liberar fondos para la gente. Hay muchas necesidades”.
Pese a las voces en contra del recorte salarial, López Obrador aseguró que es buena la discusión y la crítica.
“Yo respeto también a los que opinan distinto y se les va a garantizar siempre el derecho a disentir. Y nunca se va a violar un amparo, se les va a respetar sus derechos. Pero vamos a hablar de estos temas. Esto es la democracia. Estamos a que la gente opine”, indicó.
“¿Qué se decía antes? El pueblo no cuenta, la política es asunto de los políticos. Acá nos ponemos de acuerdo arriba, hacemos nuestros enjuagues y la gente ni se entera. Y, la verdad, lo es cierto, es que no había información, porque no se garantizaba el derecho a la información”.
La diferencia de opiniones entre uno y otro poder es algo que está en el terreno de lo inédito, señaló AMLO, pues antes no se permitía el discenso, lo que por sí mismo significa un cambio.
“¿Cuándo ha habido diferencias entre el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial? Nunca. Porque el Poder Ejecutivo era el poder de los poderes. Entonces, es realmente algo fantástico, extraordinario. Estamos en el terreno de lo inédito. Ese es el cambio, la Cuarta Transformación”.